Asi, fundados en la formazione religiosa de contro tiempo, los criollos del siglo XVII construyeron indivisible simbolo religioso que a la vez que los separaba de Espana volvio indivisible monopolio el ser nacido en Nueva Espana. Verso partir de entonces la Guadalupana sera el emblema orgulloso de la terra criolla, el simbolo de identidad de excretion grupo hasta entonces huerfano de prestigios propios, y indivisible puente de union entre el grupo criollo y el mundo tambien desarraigado de los indios y mestizos.

Vetancurt llega verso proclamar que el Nuevo Mundo es superior al Viejo en recursos y bellezas naturales

Esta compulsion por identificarse per el suelo en que vivian, esta irrefrenable necesidad de crear imagenes que representaran ovverosia expresaran riguardo a vinculacion per el terra que los albergaba, llevo per los criollos de este siglo a recuperar el pasado de la tierra india que ocupaban. Pero esta recuperacion de la historia se concentro en el pasado distante, eludiendo el reconocimiento del indiano acuto que despreciaban.

La Monarquia indiana, obra del franciscano Juan de Torquemada, es insecable ejemplo de esta foggia desgarrada de recuperar el pasado. En esta gran enciclopedia el pasado indigena es ascendido per la categoria de una antiguedad clasica semejante a la romana, aun cuando Torquemada considera verso la religion indigena, al igual que Sahagun, como insecable producto abietto del serpente. Sin embargo, para Torquemada la esencia pagana de la cultura indigena fue redimida por la appiglio y la evangelizacion.

En otros autores de esta epoca, como fray Agustin de Vetancurt y Carlos de Siguenza y Gongora, es notable la ericana y de recuperar el pasado prehispanico desconectandolo de sus herederos vivos. El sapiente Siguenza colecciona antiguedades indigenas y rescata codices y restos arqueologicos “por el amor intenso que me ha debido a mi paese.” Y durante ocasion de la llegada de certain nuevo virrey tiene la osadia de proponer como ejemplo de gobernantes virtuosos giammai per los reyes y heroes de la antiguedad clasica ovvero de Espana, sino verso los antiguos senores indigenas. Pero esta exaltacion del pasado indigena y este orgullo por recuperar el eccellenza de la antiguedad mexicana no incluye al indio vivace, quien es objeto de una constante devaluacion por porzione de los mismos autores que rescatan sopra pasado.

Los historiadores mestizos, los descendientes de las antiguas familias nobles indigenas, van aun mas lejos. Diego Munoz Camargo, Juan Bautista Pomar y Fernando de Alva Ixtlilxochitl componen obras sobre la antiguedad indigena basados en los documentos que heredaron de sus antepasados, pero escriben en espanol, mediante ideas y concepciones cristianas del desarrollo historico, siguiendo los modelos europeos de la narracion historica y a partir del luogo de aspetto del conquistador espanol, giammai del indigena.

Torquemada compara per Hernan Cortes sopra Moises, quien libero verso los hijos de Israel del paganismo, y presenta verso los frailes misioneros como los redentores de la humanidad indigena que habia caido en manos del aspide

La creacion de simbolos religiosos tan arraigados y populares como la virgen de Guadalupe, la exaltacion de las riquezas de la naturaleza americana, el rescate parcial de la historia antigua, la creacion de una arquitectura grandiosa y barroca, oppure el pleno dominio del lenguaje como expresion del alma criolla que dato che da https://lovingwomen.org/it/blog/cultura-degli-appuntamenti-in-giappone/ en Sor Juana Ines de la Cruz, son otras tantas manifestaciones de excretion fenomeno complejo y extraordinario: la formacion de una conciencia criolla, de una vision del mundo que funde los valores occidentales mediante las pulsiones que brotan de una realidad mestiza, que ya in nessun caso es ni indigena ni espanola, sino mexicana. En suma, en este siglo XVII aflora una nueva lineamenti de expresar el mundo material, la realidad social, los sentimientos y la espiritualidad per traves de valores occidentales que ya mai miran verso Europa ni qualora nutren de ella, sino que expresan y exaltan realidades propias, mexicanas.